Director del ISSSTE Guanajuato denuncia falsificación de firma y presuntas amenazas.
Denuncia por falsificación de firmas y presunto negocio millonario
Óscar Fernández Ponce, director de la Clínica Hospital del ISSSTE en la capital de Guanajuato, ha presentado una denuncia ante el Ministerio Público por la falsificación de su firma y sello, así como los de la oftalmóloga del hospital. Según Fernández Ponce, esta irregularidad afecta al menos 500 documentos relacionados con la entrega de lentes oftálmicos a derechohabientes. El director señaló que esta situación podría constituir un acto de corrupción, ya que el procedimiento para la adquisición de estos lentes a nivel estatal involucraría millones de pesos.
Fernández Ponce explicó que descubrió anomalías en el proceso de provisión de lentes a los pacientes, el cual requiere una validación previa por parte de optometría. Sospecha que detrás de esto podría haber un negocio indebido, aunque afirmó desconocer la identidad de las personas involucradas en estas prácticas.
Presiones y amenazas por negarse a firmar
En su declaración, el director del ISSSTE Guanajuato relató que Shauri Fuentes Duarte, subdelegado estatal del ISSSTE, intentó forzarlo a firmar los documentos cuestionados. Ante su negativa, Fuentes Duarte se presentó personalmente para pedirle la renuncia y, según Fernández Ponce, lo amenazó con desalojarlo del hospital con la ayuda de autoridades policiales si fuera necesario.
El director del ISSSTE Guanajuato narró que los “funcionarios de la Delegación” le comunicaron que el subdelegado tenía la facultad de cesarlo y le mostraron un documento que no era de cese, sino de renuncia. Al negarse a firmar dicho documento, Fuentes Duarte le advirtió que llamaría a Seguridad Pública para retirarlo por la fuerza de la dirección e incluso del hospital. Ante la respuesta de Fernández Ponce de que también era trabajador y derechohabiente, el subdelegado cambió su postura, afirmando que solo lo sacarían de la dirección. Al momento de la entrevista, el director seguía en funciones, a la espera de la llegada de los elementos de Seguridad Pública, y reiteró que la amenaza fue directa: debía recoger sus pertenencias y abandonar la dirección, o sería retirado por la fuerza pública. Fernández Ponce manifestó desconocer los intereses del doctor Fuentes para actuar de esta manera.
Fuente: La Silla Rota
