El Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado concluye primera fase de limpieza preventiva en zonas de alto riesgo.
Primera fase de limpieza culmina con retiro de 182.7 toneladas de desechos
El Sistema Municipal de Agua Potable y Alcantarillado de Guanajuato (SIMAPAG) dio a conocer que, como parte de una campaña anual de prevención contra inundaciones, se han retirado un total de 182.7 toneladas de desechos sólidos de las alcantarillas en la capital del estado.
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Esta labor se inició el pasado 3 de abril, con el objetivo de garantizar un adecuado drenaje pluvial durante la temporada de lluvias. Durante esta primera etapa, se realizaron trabajos de limpieza en 389 rejillas pluviales ubicadas en sectores considerados de alto riesgo, principalmente en el centro y sur de la ciudad.
Además del retiro de basura doméstica, hojas secas, cartón, botellas de vidrio y plástico, entre otros materiales, también se extrajeron 87 metros cúbicos de azolve, un sedimento compuesto por arena y grava que afecta el flujo del agua.
Diagnóstico estructural y preparación para segunda fase
Guanajuato capital cuenta con un total de 817 rejillas pluviales , distribuidas estratégicamente en puntos clave como Paseo de la Presa, Miguel Hidalgo, Noria Alta, San Javier, Villas de Guanajuato, El Encino, Plaza de Toros, Bulevar Euquerio Guerrero y diversos callejones y colonias.
Durante los trabajos de mantenimiento, técnicos del SIMAPAG realizaron un diagnóstico estructural que arrojó que 95 rejillas presentaban daños , los cuales fueron atendidos mediante soldadura para evitar riesgos para peatones y automovilistas.
La segunda fase de la campaña está programada para iniciar en agosto , después de las primeras precipitaciones importantes, con la finalidad de identificar y atender áreas donde se hayan presentado problemas recurrentes de encharcamiento.
Llamado a la ciudadanía para prevenir inundaciones
Evitar tirar basura en la vía pública es fundamental para mantener el buen funcionamiento del sistema de drenaje urbano. Los residuos que son arrastrados por el agua de lluvia suelen obstruir las rejillas, provocando encharcamientos e inundaciones menores.
“La participación ciudadana es clave en la prevención de inundaciones. Una rejilla obstruida por basura puede poner en riesgo una calle entera”, destacó Héctor Morales, presidente del SIMAPAG.
Fuente El Sol de León
