El Gobierno del Guanajuato anunció que la tecnificación del Distrito de Riego 011 y la construcción del acueducto Solís-León no afectarán los volúmenes de agua de los productores agrícolas ni de los usuarios del distrito.
El proyecto busca mejorar la eficiencia del agua y garantizar el acceso al recurso para las familias de Guanajuato.
Modernización para el campo
El Gobierno estatal impulsa infraestructura moderna que permite ahorrar agua y mejorar la productividad agrícola. La tecnificación incorpora sistemas como riego por goteo y aspersión, además del revestimiento de canales.
Las autoridades informaron que no se extraerá más agua, sino que se optimizará la disponible mediante tecnología.
Se invertirán 6,412 millones de pesos para tecnificar 10,200 hectáreas y 240 kilómetros de canales. El objetivo es recuperar hasta 120 millones de metros cúbicos de agua que se redirigirán a uso público.
Acueducto para garantizar abasto
El acueducto tendrá 187 kilómetros y una inversión de 15 mil millones de pesos, financiada por el Estado y la Federación. El agua beneficiará a los municipios de Celaya, Salamanca, Irapuato, Silao y León, que dependen casi por completo de pozos subterráneos.
La CONAGUA respalda el proyecto y garantiza el respeto a los derechos de los usuarios de la cuenca.
Compromiso con productores
El Gobierno afirmó que no habrá afectaciones para los agricultores. La tecnificación busca proteger el campo, asegurar el derecho humano al agua y mejorar la calidad de vida de las familias guanajuatenses.
El objetivo central es claro: más eficiencia, más desarrollo y cero afectaciones a los productores, anunció el gobierno estatal. Tecnificación del riego garantizará agua para el campo y hogares
