Renovando vínculos con las raíces ancestrales
En San Miguel de Allende, la Fiesta del Valle del Maíz resurge como un tributo vibrante a la herencia indígena y a la vitalidad agrícola local. Esta festividad emblemática no solo celebra la abundancia de la tierra, sino que también fortalece los lazos comunitarios y preserva tradiciones ancestrales.
Homenaje a la importancia del maíz
El evento marca el inicio de la temporada de cosecha de maíz y coincide con la festividad de San Antonio de Padua, patrón de los agricultores. Durante varios días, las calles se llenan de coloridos desfiles, música tradicional y danzas folclóricas.
Arte efímero y creatividad local
Destacan los tapetes de aserrín y flores, llamados “alfombras”, que adornan las calles principales, rindiendo tributo visual al maíz y a la creatividad local. Estas obras de arte efímero reflejan la devoción de los habitantes de San Miguel.
Actividades para toda la familia
La Fiesta ofrece concursos gastronómicos, exhibiciones de artesanías locales y recorridos por los campos de maíz, donde los visitantes pueden aprender sobre las técnicas agrícolas tradicionales y la importancia cultural del maíz en la región.
Fortaleciendo la identidad cultural
Para los lugareños, la Fiesta del Valle del Maíz no es solo una celebración, sino también una oportunidad para fortalecer los lazos comunitarios y promover el orgullo cultural. En un mundo en constante cambio, esta festividad anual es un recordatorio de la importancia de mantener vivas las raíces culturales.
Fuente: El sol de Bajio
